dilluns, 18 de novembre del 2013

La felicidad está fuera

Son pocos los que hacen el esfuerzo de escribir filosofía sin renunciar a decir lo que piensan. La actitud liberal en filosofía ha hecho que se perpetúe el silencio sobre el bien y el mal, atemorizados todos por que les cuelguen la etiqueta de moralistas.

Charles Taylor escribió un muy buen libro sobre la autenticidad hace unos años, y este mes Critchley y Webster publican un artículo al respecto en La maleta de Portbou. La autenticidad a la que se oponen es la de la búsqueda de uno mismo, el Sé tú que adolescentes enfebrecidos apuntaban en la cubierta de las primeras ediciones en Alianza de Nietzsche. Un tú que se halla dentro, no fuera. Nos buscamos y nos encontramos sin salir de nosotros mismos, pero pagando el peaje de alguna de las terapias que proliferan en la urbe del siglo XXI.

Critchley y Webster defienden en cambio una ética de la inautenticidad:

"Nosotros creemos que la inautenticidad es el núcleo del yo, lo que no significa que el yo no tenga núcleo, sino más bien que el yo es una experiencia de división, de escisión y de no coincidencia."

"Contra una cultura comprometida con una espiritualidad antestesiada y en última instancia al servicio de sí misma, que intenta hacerse pasar por felicidad, nosotros proclamamos una ética de la conciencia basada en un firme concepto del compromiso. La verdadera felicidad no está dentro de nosotros; está fuera. Reside en la exigente especificidad de lo que debemos a los demás."

2 comentaris:

  1. . A.M. Juster, “Your Midlife Crisis”

    “You found yourself—but at an awful cost.
    We liked you better when you were lost.”

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